Cómo hacer un resumen perfecto: los 10 pasos

Los resúmenes son útiles para abordar una gran cantidad de información y tenerla fácilmente disponible incluso después de un tiempo.
En general, todos los tipos de resúmenes deben ser neutrales, manteniendo el máximo grado de distanciamiento por parte de quien los escribe. Además, deben estar redactados de manera que sean comprensibles incluso para aquellos que no conocen el texto original, gracias a una sólida estructura lógica que sigue las reglas generales de coherencia. Pero, ¿cómo puede ser útil un resumen para un estudiante que se acerca a una materia, tal vez en vista de una evaluación?
La actividad misma de resumir permite aplicar y desarrollar diferentes habilidades: ya en la fase de elaboración, se inicia el proceso de memorización del contenido original. Para obtener un resultado satisfactorio, de hecho, el estudiante debe ser capaz de comprender, sintetizar y reformular el texto, siendo capaz también de seleccionar los conceptos a destacar con una escala de importancia. Así es como un alumno puede apropiarse de los temas basándose en un método de aprendizaje completamente autónomo.
¿Cómo hacer un resumen perfecto: los 10 pasos
Aunque a menudo se dan por sentadas las habilidades de resumen, en realidad existen pasos simples y claros para hacer un resumen perfecto. En esta sección, presentaremos uno a uno los diez pasos a seguir, junto con indicaciones generales a tener siempre en cuenta:
- Preparación del plan de trabajo;
- Primer acercamiento al texto;
- Lectura en profundidad;
- Identificación de las cinco W;
- División del texto en secciones;
- La "doble" subrayado;
- Primera esquematización;
- Redacción del resumen;
- Revisión del resumen;
- Transcripción en limpio.
Preparación del plan de trabajo
Para comenzar a elaborar tu resumen, prepara el plan de trabajo y todo lo que necesitarás para proceder:
- Texto original;
- Material de escritura (lápiz, pluma, goma, sacapuntas...);
- Varios papeles, al menos uno para el borrador y uno para la versión final.
Este paso es particularmente importante para sumergirse en la actividad de aprendizaje, especialmente para los estudiantes con trastornos de atención, a quienes también se les recomienda tener el espacio libre de cualquier otro elemento.

Tener un plan de estudio ordenado y funcional es importante para mantener la concentración y optimizar los tiempos de trabajo. Para resumir, también puedes utilizar las herramientas tecnológicas. En este caso, necesitarás una computadora, pero te recomiendo tener a mano hojas de papel, porque la organización manual puede ayudar a aprender y organizar ideas.
Enfoque inicial del texto
Comienza a acercarte al texto, que deberás leer atentamente tratando de comprender cada paso de inmediato. La primera lectura es importante para familiarizarte con los contenidos, comenzando a formarse una idea de cuáles son los conceptos principales transmitidos.
Lectura en profundidad
Luego pasa a una segunda lectura, que debe ser más profunda y centrada en las conexiones lógicas presentes en el texto. En otras palabras, debes comprender cuáles son los hilos que el autor teje para transmitir sus ideas y llevar al lector a las conclusiones.
Identificación de los cinco WH
Después de leer el texto por segunda vez, puedes preguntarte y anotar las llamadas cinco preguntas WH que funcionan como la "identidad" del texto original:
- Who - quién: ¿cuál es el sujeto o protagonista del texto?
- What - qué: ¿cuáles son las acciones del sujeto?
- When - cuándo: identifica el momento y la posible secuencia temporal presente en el texto;
- Where - dónde: ¿cuál es el escenario del texto?
- Why - por qué: ¿cuáles son las motivaciones del sujeto y las ideas descritas?
En esta etapa, recuerda que algunos textos pueden no tener respuestas para todas estas preguntas, especialmente si se trata de narrativa y no de temas de estudio más teóricos. En ese caso, no te preocupes y selecciona solo la información presente en el texto, sin forzar ni agregar nada tuyo.
División del texto en secciones
Luego, identifica las diferentes secciones que componen el texto: a menudo son fácilmente identificables gracias a los signos de formato (párrafos, saltos de línea y espaciados). Cada sección puede verse como una pequeña parte de texto independiente de la cual extraer los conceptos fundamentales.
La "doble" subrayado
Luego, destaca los conceptos clave de cada sección. Dependiendo de la longitud de las partes del texto, pueden ser más o menos numerosos, pero en general, ten en cuenta que el resumen final debe tener aproximadamente un tercio del número de palabras del texto original. Al mismo tiempo, subraya también los conectores lógicos y las preposiciones relevantes, que al conectar las diferentes partes del discurso, hacen comprensibles las relaciones internas en el texto.
